EL TERREMOTO DESCUBRE LA INEFICIENCIA DEL GOBIERNO Y LA VERDADERA REALIDAD DEL PAÍS

El mismo gobierno que semanas antes del terremoto se jactaba el gran crecimiento económico que vive nuestro país hoy no sabe que hacer ante tan terrible azote de la naturaleza, donde salió a relucir toda la incompetencia del actual gobierno, y la pobreza y precariedad en que vive la gran mayoría del pueblo peruano.
El mismo día del terremoto colapsaron las líneas telefónicas quedando todo el Perú incomunicado, de nada sirvió que hayamos adquirido un celular multimedia, RPM, etc. de varios cientos (y hasta miles) de soles. Igual no nos pudimos comunicar, debido ala incompetencia de la empresa transnacional Telefónica. Mientras tanto la ministra de transportes y comunicaciones, Verónica Zavala, que más parece ser ahora la vocera de Telefónica se ha encargado de defenderla con un discurso claramente parcializado a favor de esta empresa. Probablemente Telefónica termine, como lo ha hecho siempre, zafándose de este grave problema sin, ni siquiera, solucionarlo y este hecho quede impune.
A unas horas del terremoto, el Presidente García lanza un discurso en el que “agradece a Dios” de que no haya ocurrido nada, cuando casi toda la región Ica, algunas ciudades de Huancavelica e incluso la cercana Cañete estaban devastadas, este desconocimiento de García mostro no solo su incompetencia, sino también la de sus asesores y del gobierno en general, ya que la tragedia era ya conocida, incluso el corresponsal de RPP en Ica y otros iqueños que llamaron a la radio dieron cuenta, casi una hora antes, de los terribles destrozos que se habían producido, entonces ¿RPP está más informada de lo que pasa en el Perú que el propio presidente?
La prensa nacional y extranjera habían llegado a mostrarnos imágenes de la tragedia ¿y el gobierno? Llegó mucho después e incluso aún no llega la ayuda a algunas zonas donde los periodistas llegaban y donde se puso en evidencia la desorganización del gobierno a la hora de enfrentar una catástrofe, el propio presidente que junto a sus ministros se “dio una vuelta” por la ciudad de Ica y fue abucheado y pifiado por la población. Algunos habitantes de zonas alejadas recuerdan que durante la campaña electoral llego el actual presidente con una gran comitiva (de apristas) y sin embargo ahora no pueden llegar, y es que García durante su campaña electoral pudo visitar más ciudades y en menos tiempo que en plena tragedia nacional.
Pareciera, además que el presidente durante su “paseíto” por Ica se olvido de sus dosis de litio, hecho que fue evidenciado por su accionar y sus lamentables declaraciones, como cuando un periodista le español le pregunto sobre la ineficiente distribución de la ayuda por parte del gobierno. García respondía que los países en tragedias como esta y ¡¡¡¿¿¿La guerra civil española???!!! Tardaban en recuperarse, o cuando voluntarios españoles se quejaron por el desgobierno que había en Ica a lo que García respondió, “el que tienen miedo que se vaya a su casa” y ni que decir de sus insultantes declaraciones a los damnificados que hasta ese momento no habían recibido ninguna ayuda y sobrevivían como sea, a los que les recomendó que “no lloraran ni mendigaran por comida”.
Y ni que decir de la “ideota” del ministro de producción Rafael Rey de regalar Pisco a los países que colaboraron, en una edición especial llamada “Pisco 7.9”, creo que sobre eso ya se ha dicho bastante.
Finalmente el gobierno no solo demostró su ineficacia en la atención a desastres como estos, sino también en su prevención, Hernando Távara, científico del Instituto Geofísico del Perú, había advertido ya hace un par de años de la alta probabilidad de la ocurrencia de un sismo en la zona de Ica, a lo que las autoridades ni se inmutaron, la poca previsión en estos casos es más que evidente si tenemos en cuenta además que vivimos en zonas de alta actividad sísmica. Así vemos que el ministro de educación, por ejemplo, prefiere gastar los escasos recursos que se le asignan al sector de educación en propaganda anti-sindical que en reforzar la infraestructura de los colegios del Perú, muchos de los cuales sufrieron graves daños durante el terremoto.
Este es pues, el Perú de gran Crecimiento económico, del crecimiento sí, pero no de desarrollo, de crecimiento económico sí, pero para algunos pocos. Probablemente muchos pobladores tengan que volver a construir sus casas de adobe, a lo mucho reforzado con quincha, por que no son para nada, participes de ese tan anunciado crecimiento económico.